Editorial: Salamandra
Colección: Crónicas de la prehistoria
Año de edición: 2005 (1ª ed)
Torak es un niño de doce años que vive con su padre en la prehistoria. Viven desvinculados de los clanes y alejados de toda población. Un fatídico día, un oso endemoniado ataca a nuestro protagonista y a su padre. Malhiere al padre de Torak, que se ve obligado a abandonarlo y dejarlo en manos del oso. Antes de morir, Pa (el padre de Torak) le hace jurar que llegará a la montaña donde reside el espíritu del mundo, para pedirle que detenga al oso endemoniado, que amenaza con destrozar el bosque y todo habitante que en el resida. Por el camino, entablará amistad con un lobezno al que su manada ha dejado y se ha quedado solo en medio del bosque. También encontrará a una muchacha llamada Renn que, abandonando a su clan, se unirá a él en el camino.
Un libro chulísimo. Leerlo ha sido como volver a la edad de piedra y verte totalmente involucrado en el importante viaje de Torak. También me ha recordado ligeramente a Pax, por la forma de lobo de ver a los humanos. Por ejemplo, Torak, para él, es Alto Sin Cola. Todos los personajes me han parecido entrañables, en especial lobo.
Torak es un niño de doce años que vive con su padre en la prehistoria. Viven desvinculados de los clanes y alejados de toda población. Un fatídico día, un oso endemoniado ataca a nuestro protagonista y a su padre. Malhiere al padre de Torak, que se ve obligado a abandonarlo y dejarlo en manos del oso. Antes de morir, Pa (el padre de Torak) le hace jurar que llegará a la montaña donde reside el espíritu del mundo, para pedirle que detenga al oso endemoniado, que amenaza con destrozar el bosque y todo habitante que en el resida. Por el camino, entablará amistad con un lobezno al que su manada ha dejado y se ha quedado solo en medio del bosque. También encontrará a una muchacha llamada Renn que, abandonando a su clan, se unirá a él en el camino.
Un libro chulísimo. Leerlo ha sido como volver a la edad de piedra y verte totalmente involucrado en el importante viaje de Torak. También me ha recordado ligeramente a Pax, por la forma de lobo de ver a los humanos. Por ejemplo, Torak, para él, es Alto Sin Cola. Todos los personajes me han parecido entrañables, en especial lobo.
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